miércoles, 5 de marzo de 2008

Homomonio vs matrimonio


Y entre tanta polémica creada por los peperos, un grupo denominado ecopacifistas trató de modificar la palabra matrimonio por homomonio, lo cual ni siquiera se debatió por no llegar a reunir las firmas necesarias.
Si es que parece que no quieren darse cuenta todos estos que pretenden ayudar, tanto los voluntariosos conciliadores heteros como los gays que parecen acomplejados de ser iguales y se conforman con un mínimo de derechos.
Es hora de deciros primero que llamar nuestro emparejamiento de otro modo es reconocer que somos algo aparte de la sociedad, distinto, marginal ya que es hacer una ley específica. Hoy día, la única ley específica necesaria sería una ley antihomofóbica para combatir todo aquello que se sale de lo constitucional y la convivencia.
Y segundo, justificar esa modificación porque así los fascistoides se calmarían es caer en un error. No hay mayor prueba que observar a Italia. En Italia iban a hacer una ley de mínimos para reconocer a las parejas homos y la han tirado a la basura porque los mismos que aquí se han opuesto allí tienen más fuerza (el Vaticano está en el mismo centro del país). Con ello queda claro que no es cuestión de terminología lingüística sino de homofobia aunque pretenden velarla.
Todo lo que no sea matrimonio, (llámesele pareja de hecho, unión civil, etc) es limitar nuestra plena integración como parejas pues sólo con el cambio se pierden derechos que recoge el Código civil exclusivamente para los matrimonios. Si no que se lo digan al resto de gays europeos que tienen leyes lights en materia LGTB y miran esa otrora atrasada España que se ha convertido en la más avanzada en materia LGTB con admiración. Dice Rajoy que sólo 2 países lo aceptan en Europa (Países Bajos y Bélgica), pues vale, por una vez somos los primeros en progresar. Es una lección no sólo para Europa sino para todos los países latinoamericanos, para empezar, de un presidente que está comprometido con la democracia real.

No hay comentarios: